Enoturismo

Rebusco en mi interior y no encuentro otra palabra para describir lo que quiero trasmitir; nunca me entusiasmó la palabra enoturismo, pero, posiblemente, no la haya mejor para definir lo que a continuación propondré. Y tal vez sólo sea esa maldita herejía, que tan frecuentemente se produce en nuestro lenguaje, la prostitución de las palabras, la que provoca mi instintivo rechazo.

Porque a donde quiero llegar es a esa hermosa comunión entre quienes nos dedicamos al trabajo en el campo y a la consecuente elaboración del vino, con la gente, con el amante de nuestro trabajo, con el destinatario final de cada uno de nuestros esfuerzos y nuestros desvelos; porque si nuestro camino continúa es gracias a todo ese personal inquieto que desea descubrir quienes estamos detrás de esa copa de vino que le provoca y que en algún momento le hizo disfrutar.

Siempre he aborrecido esas visitas guiadas, tipo rebaño de borreguitos siguiendo a un pastor indocumentado que a modo de impersonal relato te va dejando caer cuatro datos mal hilvanados mientras te enseña las maravillas arquitectónicas de esa sala de barricas construida con el apoyo interesado de algún banco crediticio (por no hablar de esas ayudas en forma de fondos perdidos a las que algunos paecen tener mejor acceso que otros).

En contraposición a ese horror turístico, ¿Qué ofrecemos en Orly Lumbreras Viñador? 

Ante todo, charla, cercanía, humanidad, proximidad.

¿Qué podrás vivir en La Gesilla, la finca donde se levanta nuestra humilde bodega?

Sentimiento, artesanía, vino, sensibilidad, catar muestras directas de la barrica… descubrir como se hacen las cosas con las manos, con los pies, con el corazón. 

Una bodega no es un museo, no es un cuadro; una bodega es tierra, es estremecimiento, es vida, son levaduras, es fermentación, es ebullición, es pasión y emoción… y eso hay que vivirlo, sentirlo y conocerlo.

El enoturismo no son tickets, es compartir; trasmitir desde nuestra alma a vuestro corazón y vuestro paladar.

Para nosotros es un placer abrir nuestras puertas, llenar vuestras copas, charlar y escuchar. 

Te esperamos… te anhelamos.

22 de Octubre de 2021